Los resultados electorales en Andalucía abren un escenario de incertidumbre que no benefician a la estabilidad necesaria para afrontar los retos pendientes. UGT-A entiende que son reflejo de la frustración de la ciudadanía ante la falta de políticas sociales eficaces que resuelvan los problemas reales de la gente.
«Independientemente del gobierno que surja de este escenario, UGT-A seguirá luchando por mejorar los derechos de la clase trabajadora, denunciando la precariedad y exigiendo medidas que eliminen la siniestralidad laboral, y la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres; continuaremos exigiendo unos servicios públicos de calidad, y la eliminación de los recortes que han venido sufriendo los empleados públicos y de la violencia de género. No daremos un paso atrás en los derechos sociales conseguidos tras 130 años de lucha, así como le exigiremos a los partidos políticos que no se permita un retroceso en los avances sociales conseguidos en los últimos años, velando siempre por una sociedad democrática y bajo los principios de igualdad, solidaridad y convivencia ciudadana pacífica», han indicado desde el sindicato.
La secretaria General de UGT-A se encuentra en Copenhague participando en el IV Congreso Mundial de la Confederación Sindical Internacional. Carmen Castilla ha manifestado que la baja participación proviene de la frustración de la ciudadanía ante la clase política porque dicen mucho pero hacen poco, por la gente que lo está pasando realmente mal. Nuestra propuesta es que haya más políticas sociales, que estén cercanas a los problemas reales de la población, que necesitan empleo, educación, sanidad, ayuda a la dependencia, lo que haría que recuperaran la confianza en la clase política».
Para el sindicato, esos datos reflejan la necesidad de reforzar la conexión entre la democracia y la ciudadanía porque, sobre todo los trabajadores y las trabajadoras siguen sin encontrar marcos de referencia en la política. En ese sentido, López Marín ha hecho un llamamiento a los partidos para que hagan una profunda reflexión tras no haber sido capaces de canalizar el descontento de los trabajadores y las trabajadoras andaluces, cansados de la crisis y de las políticas de recorte.
El sindicato ha dejado claro en cualquier caso que sus reivindicaciones a las fuerzas del Parlamento andaluz seguirán siendo la defensa firme del empleo de calidad, de la subida salarial, y de la mejora de las condiciones laborales.
Asimismo, ha pedido que los elementos de igualdad, las necesidades de las personas, los derechos sociales, los servicios públicos y la cohesión social, sean la referencia en el marco constitucional.